Tijuana, México, el 31 en la mañana


Tijuana, la Ciudad más al Norte a América Latina, es famosa entre otras cosas por su vida nocturna y el tráfico continuo de carros y pasajeros con los EE.UU, aunque también algunos dicen que por las compras baratas, sin embargo la gran cantidad de centros comerciales y tiendas por departamentos de las grandes cadenas americanas como, Target, Ross, Wal-Mart y otras, me hizo pensar todo lo contrario. En lo que posiblemente tengan mejor precio sea en los artículos de cuero y plata, ropa tejida a mano, productos de droguerías o farmacia y los originales tabacos cubanos, prohibidos en los EE.UU.

Con la experiencia de anoche decidimos ir a Tijuana en el TROLEY, que incluso es tan cómodo y económico que ni siquiera se justifica llegar en nuestro vehículo hasta los estacionamientos de la frontera. Otra condición para el viaje era regresar temprano.

Por la mañana nos reunimos en el lobby del hotel y apenas al pasar la calle está la estación del Troley o Trenes que por $5 te puedes subir y bajar todo el día. En esta estación y con solo una parada intermedia hacemos transferencia en la “12Th & Imperial Transfer” hacia la línea azul que nos lleva previo unas 11 estaciones de “sube y baja” en realidad bien rápidas, hasta San Ysidro en toda la frontera.

Nos apertrechamos bien con suculento desayuno en la primera estación y 40 minutos después estábamos en la frontera, la cual se pasa hacia México sin darse cuenta solo siguiendo a los mexicanos que sus paquetes pasando el puente peatonal y al bajar del mismo ya estamos en México.

Bendita América Latina, su comida callejera, su gente el bullicio típico de cualquiera de nuestros pueblos y además con una atmósfera cargada de “sal” que la hacer ver como gran ciudad contaminada.

No fue difícil contratar dos taxis por $35 cada uno para que nos llevaran a dar, como verán en las fotos y el video, un recorrido panorámico de la ciudad y una parada obligada en el motivo principal de esta visita: Tomarnos la foto en el lugar más al Norte y al Oeste de América Latina. Y así lo hicimos, con su Monumental plaza de Toros de Tijuana apenas a 30 metros del MURO, su faro, el Muro de hierro que se interna en el agua y observar una “patrullera” vigilante del lado Norteamericano hizo realidad nuestra intención de esta visita.

Paisaje montañoso desértico por toda la vía fronteriza, pasamos cerca de la Catedral, el Monumento al Indio, el arco de la Revolución, la plaza de las Tijeras y nuestro segundo motivo: Comer bastante TACOS al PASTOR. Y lo logramos en toda la frontera en el Rincón del Taco, un típico puestico de comida mexicana, bien atendido, limpio y de excelente calidad, comimos hasta la saciedad como para justificar el haber pasado la frontera.

De regreso de nuevo la interminable rampa para pasar la ancha avenida y bajar hasta el recinto de inmigración donde comienza la típica agonía de entrar a los EE.UU. Que por qué viniste, que haces, adonde vas, etc., etc., tanta preguntadera de doble sentido que empezamos a sospechar de nosotros mismos, pero en fin ese es su sistema y tenemos que aguantarlo.

Una vez fuera consideramos que nos llevamos un bonito recuerdo de la corta estadía en tierras mexicanas y a esperar el tren para regresar al hotel y planificar lo que vamos hacer esta noche para recibir el año 2008.
Vea AQUÍ el album con  fotos sobre un día en TIJUANA:


Pasando la frontera hacia TIJUANA, MX.

... y aquí el resumen en VIDEO:


08- A Tijuana
Cargado por lag24